lunes, 2 de marzo de 2009

Breve historia al culto de la Santisima virgen del Rosario (*)



EL origen del santuario y del culto a la Virgen del Rosario en Hellín está rodeado de tinieblas. Los pueblos van acumulando a través de los siglos poesías y leyenda en torno a lo que más aman y al cabo de los siglos no se sabe en dónde acaba la historia y dónde comienza la fantasía. En el nuestro ocurre igual. Historiadores hay-o por tales se precian -que a fuerza de remontarse en el tiempo sitúan la devoción a la Virgen del Rosario aun antes de que Santo Domingo predicara esta práctica, que se dice por él fundada (1).

Pudo muy bien ocurrir que existiera alguna ermita dedicada a la Virgen en el sitio que hoy ocupa la Patrona y en torno a esta imagen se tejiera la leyenda luces y moros similares a las de tantas otras Vírgenes españolas. Se habla incluso de una iglesia de los mozárabes. Todo ello pudo ser y está en favor nuestro la situación atrevida y pintoresca del santuario.

Hasta la fecha, y mientras nuevos descubrimientos no lo rectifiquen, el dato histórico cierto más antiguo es de 1564. En dicha fecha ya existía la Cofradía del Rosario y la Ermita. Se trata de una cláusula del testamento otorgado por Pedro Pérez Vela ante el escribano de Su Majestad y Público Antón BERNAL. Dice así dicha cláusula: <<ítem mando: que de que la voluntad de mi Señor Jesucristo quiere Llevarme de este presente siglo, que mi cuerpo sea llevado a la Iglesia de Santa Mar" de esta, villa por los curas de la dicha iglesia; mando que mi cuerpo sea sepultado en mi sepultura que allí tengo y que acompañen mi cuerpo en mi enterramiento los Mayordomos e Cofradía de Nuestra Señora del Rosario con la cera de dicha Cofradía. >>

Cuando nace don Rafael Melchor de MACANAZ está muy arraigado en HELLIN la devoción al Rosario. Sabido es que esta devoción tomó un in cremento extraordinario con la batalla de LEPANTO y se instituyó la festividad de Nuestra Señora del Rosario en 7 de octubre por ser ese precisamente el día de la célebre victoria. Esa fecha se celebraba en HELLIN. Nos dice MACANAZ, con la misma solemnidad que la del Corpus (2). Con tribuiría a ello, sin duda, la circunstancia que nos transmite el mismo MAS CANAZ, de encontrarse presentes en dicha batalla «doscientos soldados y cuatro capitanes de HELLIN, mi patria: Juan de VALCARCEL, Francisco HERRERA, Damián MACANAZ, mi bisabuelo, y Luís FERNANDEZ DE RI BERA, mi bisabuelo materno>>. Dos de éstos fueron luego escribanos y tal vez el archivo notarial guarda alguna sorpresa.

De la devoción de MACANAZ al Rosario es dato elocuente el que sustituyera ciertas costumbres que se practicaban en la celebérrima Universidad de SALAMANCA y que degeneraban con frecuencia en reyertas sangrientas, por el rezo del Rosario y procesiones públicas en honor de la Virgen. Sin duda, le ayudó en esto el dominico hellinero Antonio de MACANAZ, hermano de don Melchor.

Por no se sabe qué causa, a principios del siglo XVIII desaparecieron las antiguas constituciones y la Cofradía no marchaba con la debida regularidad, y para poner remedio a estas deficiencias, el doctor don Andrés ESPINOSA Y OROZCO, beneficiario y cura propio de la Villa, asistido de la mayor parte de los feligreses, acordaron las constituciones por que había


de regirse la Cofradía, en su mayor parte tomadas de las antiguas. La parte expositiva decía así:

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Las constituciones aprobadas fueron veinte, y en ellas se trataba principalmente de los cultos a Nuestra Señora del Rosario en las festividades de la Purificación, Natividad y del primer domingo de octubre; de las procesiones del Santo Rosario; de la ceremonia del Desenclavamiento y Santo Entierro de Cristo (3); de la misa al Espíritu Santo antes de las Juntas; de la limosna que daban los mayordomos el día de la festividad del Santo Rosario a los ancianos pobres y que consistía en una libra de pan y otra de carne y de la facultad que tenían los mayordomos de pedir de puerta en puerta (4); del número de mayordomos y consiliarios que componían la Junta de Gobierno con las normas completas para su desenvolvimiento ad-

Fueron aprobadas con fecha primero de abril por el excelentísimo señor Arzobispo de Cartagena, don Tomás José de MONTES, según auto que remitió a la Cofradía el señor doctor don Andrés DE RIBERA, chantre dignidad y canónigo provisor y vicario general del Obispado. Con lecha 26 de mayo de este mismo año 1737 celebró Junta la Cofradía, y el presidente exhibió el nombramiento de camarera de Nuestra Señora a favor de doña Juana VELASCO CORTES, que llevaba fecha 18 de marzo. Reorganizada la Cofradía, el secretario don Francisco GARCIA hizo entrega a la camarera el 28 de mayo de todas las alhajas ropas de Nuestra Señora bajo inventarlo ante don Miguel MONTESINOS y don Alonso GUERRERO, comprometiéndose doña Juana VELASCO a responder de todo con sus bienes y rentas. Actúan de testigos don Alejandro NÚÑEZ CORTES, Juan ESTEBAN, Mateo ESPINOSA y Felipe SORIANO, todos vecinos de la Villa de HELLÍN.

Prácticas Religiosas

Merece consignarse la procesión diaria del Santo Rosario que salía todas las noches antes del toque de oraciones, con la asistencia de un cofrade sacerdote llevando un crucifijo y acompañado por cinco cofrades que lleva bao el estandarte y cuatro faroles apara obligar por tan laudable medio a Nuestra Señora que continúe favoreciendo a sus devotos y vecinos».

Los primeros domingos de mes se hacía esta procesión con más solemnidad, Asistía todo el clero de la parroquia. Para esta procesión y las del primer domingo de octubre y Natividad contribuía la Cofradía con 110 rea. les y el cura párroco 12 reales más (5).

Los primeros domingos de mes se celebraba una misa por los cofrades vivos y difuntos (6), y todos los años, el día 9 de septiembre, en que se renovaban los mayordomos, se celebraba misa del Espíritu Santo para el mayor acierto en la elección.

En las festividades de la Virgen del Rosario y Natividad, se celebraban vísperas, misa cantada con diáconos, sermón y procesión, contribuyendo con 45 reales por el sermón, 15 por la limosna de la misa y diáconos y otros 15 por la música de la capilla (7).

Para regocijo del pueblo se amenizaban estas fiestas con pólvora, iluminación de la torre, dulzaina, serenatas en el y fiestas de danzantes.

Desde 1751 a 1774 las novenas y pláticas espirituales se hicieron a solí. citad y devoción de don Blas de los RIOS SORIANO.

Este ilustre y devoto cofrade se encargaba de recoger las limosnas necesarias para estos devotos novenarios. Los gastos oscilaban entre 300 y 400 reales. En los años 1757 leemos: De tres libras de bizcochos para el predicador y másicos dos azumbres de vino, 14 reales. De la cena que di a los másicos la última noche de novena... además de tres libras de carne que me dió de limosna don Juan de Cutillas y un capón Andrés Polo, 14 reales.

En el año 1763 se hizo el novenario en el Convento de Santa Clara, y don Blas de los RIOS lo consigna así (8): Memoria y cuenta del gusto y limosnas de la novena del año 1763 de Nuestra Señora del Rosario, hecha en el convento de religiosas de Santa Clara por el motivo de estar la ermita hundiéndose el tejado ~ por casualidad de haber sacado en procesión a Nuestra Señora en acción de gracia de habernos socorrido can agua y llover en la procesión, ~ al Llegar a las monjas apretó el agua de suerte que fué preciso rematar la procesión ~ se determinó por el señor vicario y mayordomos que quedase allí Nuestra Señora hasta perfeccionar ~ asegurar su Santa Casa.

El Retablo

La Cofradía alcanzó, como se ve, a mediados del siglo XVIII, un florecimiento grande a impulsos, sobre todo, de don Blas de los RIOS. El retablo desaparecido en 1936, la barandilla del presbiterio y el púlpito son de esta época.

El día 14 de mayo de 1747 se celebra una junta, y en ella se acuerda construir un retablo suntuoso. Terminada la obra en madera en junio de 1751, se vuelven a reunir los cofrades y acuerdan dorarlo, encomendando dicha tarea al maestro dorador de Murcia Juan de ELVIRA, por escritura que se otorgó ante Diego Manuel NIETO, escribano público del número y Ayuntamiento de esta villa, en la cantidad de 5.000 reales vellón.

No sabemos cuánto costaría la obra de madera, aunque se conocen los nombres de los cofrades que intervinieron como comisionados para inspeccionar los trabajos, y fueron don Salvador MOROTES y don Pascual NIETO, presbíteros, y don Antonio VELASCO y don Pedro FERNANDEZ BALBOA, seglares. Se ignora también hasta la fecha quién lo construyó. Lo que conocemos con certeza es que los recursos escaseaban y en la nueva junta se acuerda pedir de puerta en puerta e ingeniar medios de adquirir recursos. Para ello se nombró a los presbíteros don Manuel PEREZ VELA y don José PEREZ y a los seglares don Jaime de SALAZAR y don Blas de los RIOS SORIANO.

No tuvieron gran éxito las gestiones por la escasez de cosechas de aquel año 1751, y el 19 de octubre se acuerda vender 40 libras de cera y hacer varias rifas y fiestas de toros.

Las corridas de toros fueron dos y se consignan en la crónica estas partidas De una banderilla que pusieron en nombre de Nuestra Señora del
Rosario en una corrida de toros, en el primer día, ciento cinco reales; en
el segundo día, noventa reales. De un cajón que se hizo de limosna, para
ver los toros en el primer día setenta ~ un red, siete maravedises; en el segundo día, setenta ~ nueve reales y dos maravedises.

Las subastas que se hicieran se pagaban en trigo. Consignamos estas partidas curiosas. Primeramente tengo recibidos cincuenta y siete celemines de trigo por arr' rollo de masa que hizo de limosna Francisca RODRIGUEZ lo remató Diego PINA y compañeros en esta forma: Diego PINA dió doce celemines; Diego GRAU, doce celemines; Salvador SÁNCHEZ, diez y me Lucas de VALCÁRCEL, diez y medio. Juán GARCIA remató un ballico de azúcar que dieron de limosna las religiosas de Nuestra Madre Santa Cla ra, en diez celemines de trigo. Ginés MOLINA, por una lámina de azúcar que dió de limosna doña Josefa MOROTE, la remató en trece celemines. Se recogieron así doscientos ocho celemines de trigo, que fueron vendidos a veinte reales la fanega.

Las monjas de Santa Clara compraron tres palmos de espolín encarnado que sobró de un manto de la Virgen y lo pagaron en dulces. Se rifaron estos dulces y produjeron doscientos veintitrés reales de vellón.

El Camarín

Nos interesaría saber algo de la historia del camarín, no sólo por ser lo más venerable de la ermita del Rosario, sino porque es lo que ha llegado hasta nosotros más integro. Poco sabemos. Nada sabemos de su construcción ni del autor de sus pinturas. Estas no son de un mérito excepcional, pero son para todo hellinero entrañablemente queridas. Muy deterioradas quedaron en la última guerra, pero fueron restauradas en 1945 por el pintor murciano MUÑOZ BARBERAN

En lo que se refiere a la construcción de los arcos y cornisas con espejos y dorados, tiene la fecha de 1762, y para su ejecución se dió amplios poderes al benemérito cofrade don Blas de los RIOS. Gracias a él tenemos algunos datos. El importe total de la obra fué de 7.636 reales y 18 marave. discs. en la forma siguiente: 5.557 importó la madera y el trabajo de talla de los arcos y cornisas con las lunas de los espejos; 1.398 reales, 93 libros de oro que se trajeron de Madrid; 123 reales los materiales para sentar el oro, y 158 reales de sentar el oro, a razón de seis reales por cada libro.

En el año 1760 se hizo el cuadro de Nuestra Señora del Rosario para cubrir la boca del camarín (9), siendo su costa de 446 reales, y para ayuda dió don Antonio VELASCO CORTES 300 reales de limosna. En 1776 se hizo un artístico frontal de espejos y talla dorada, importando su construcción 1.006 reales, y las puertecitas del altar que dan acceso al camarín, cien reales.

Privilegios Espirituales

Fray Francisco SOLIS, prior del convento de los dominicos de San Juan Bautista de Chinchilla, concede en 1779 a la Cofradía del Rosario de HELLIN grandes privilegios y nombra capellán al presbítero don Santiago RUIZ Y RUIS con todas las facultades anejas al cargo.

A mediados del siglo XIX colmó de indulgencias a la Cofradía el Obispo de Cartagena don Mariano BARRIO FERNANDEZ.

Poco a poco se fueron olvidando las practicas propias de la Cofradía, como la procesión de los primeros domingos, etc., hasta extinguirse por completo, perdiéndose hasta la denominación de Cofradía y transformándose en piadosa Hermandad, por lo que volvió a solicitar de los superiores de la Orden de Santo Domingo la nueva erección en Cofradía. Fué concedida esta gracia en 1945 por el Vicario general de la Orden en España, R. P. José CUERVO, actual provincial de la provincia de Buenos Aires (Argentina).

Alhajas y ropas de Nuestra Señora

La mayor parte de las noticias que tenemos referentes a la Cofradía y a la Virgen del Rosario se refieren al siglo XVIlI. Abundan las donaciones de ropas y alhajas. Entresacamos las siguientes: Un frontal de raso blanco que dió de limosna doña María MACANAZ ; otro frontal pajizo que dió doña Beatriz de MOLINA; un manto de terciopelo azul y traje para el niño que dió doña Ana PORTOCARRERO; siete campanillas de plata; un dije de oro del Niño que dió don Francisco SALINAS, padre franciscano Fr. Antonio José, que llegó a Obispo de Tortosa; una cruz de perlas de filigranas de oro que dió doña Josefa BALBOA; una cruz de oro que dió doña Catalina MARIN; un manto de espolin de plata con flores de oro de un medio color que tira a morado, que hicieron de limosna don Diego VELEZ doña María RODRIGUEZ, su legítima mujer, y estrenó Nuestra Señora el día 8 de diciembre de 1773. Importó este manto mil seiscientos tres reales y veinte maravedís.

En el año 1754 se compró una lampara de plata de 138 onzas y media de peso, que fué construida en CORDOBA. Costó 3.215 reales y la transportó a HELLIN Manuel GARCIA MONTABLANEJO por 12 reales.

Al año siguiente se encargan a MURCIA unas coronas de plata sobredoradas para la Virgen y el Niño por 3.279 reales, que llegan a HELLIN el 1.° de febrero de 1756.

Recursos Económicos

La limosna era, como lo es hoy, el sostén de la Ermita y del culto del Rosario. No sabemos si la falta de recursos era por la extraordinaria abundancia de obras o por el descenso de la piedad en los fieles. Lo cierto es que todo es imaginar nuevos recursos.

En 1773 se facilita a don Blas de los RIOS para construir una casa y una mesa de juegos de trucos a beneficio de la Ermita, cuyo importe fué de 2.641 reales 14 maravedises. Se inauguró la mesa de trucos y la casa el di& 21 de agosto de 1774, y hasta el día 21 de septiembre del siguiente año produjo la cantidad de mil reales. La casa estaba situada a la derecha del atrio.

Como se advierte fácilmente, apenas podemos dar un paso sin tropezar con el nombre del benemérito cofrade don Blas de los RIOS. A él se deben también las importantísimas reformas del atrio en 1798, que culminan en un víacrucis de azulejos que construyó el alfarero de la villa Pedro HERNANDEZ.

Más de 10.000 reales importaron todas las obras de los atrios. A todas acudía con esplendidez y con su trabajo el nunca bien alabado don Blas, médico titular de esta villa.

Hechos Milagrosos

Como tales cita algunos don Blas de 109 RIOS Consignemos uno de 1749. Día 22 estuvieron picando piedra Manuel BALBUDO ~ Felipe GARCIA, hicieron de limosna dos reales ~ en dicho día, con lumbre de los picos o chispas que saltaban, se emprendió arr' barreno que no se sabía haber tal cosa; y sido así que el taco y chispas del mismo barreno hicieron bastante señal en la pared de el frente donde trabajaban los expresados, por permisión de la Virgen, no les ofendió ni les impidió su trabajo.

En otra ocasión se estaba trabajando en el arreglo de las bóvedas de la Ermita, y el día 5 de diciembre de 1750 ocurrió que «>. Del mismo arquitecto y del maestro de obras Juan Felipe LOPEZ es la torre que se construye en 1876.

En septiembre de 1874 las fuerzas, callistas de bravo e inteligente coro. nel don Miguel LOZANO Y HERRERO oyeron misa de campaña en el <`plano>, (10).

Las obras son signo de vitalidad, y así se manifiestan en el Rosario, ya que de nuevo tenemos noticias de la Cofradía en 1886, en que se hacen nuevas constituciones, siendo elegido hermano mayor don Enrique PARRAS, tesorero don José LENCINA y secretario don José MILLAN. Al año siguiente y siempre bajo la dirección del arquitecto don Justo MILLAN, se construye el pórtico de la Ermita, y en 1888 se elevan las bóvedas de toda la iglesia y se pone cubierta nueva. En este año se colocó también IA verja del coro, que dió de limosna el arquitecto.

Esta junta directiva cesa a principios del siglo xx y trata de dar nuevo impulso a la Cofradía el cura don Esteban de LEON Y CLEMEN'I?E, sin éxito alguno.

EL párroco don Laureano LOPEZ hace un nuevo reglamento, sin tener en cuenta las viejas constituciones de la Cofradía, que es alternativas de éxitos y fracasos funcionó hasta 1936.

En tiempo de don Laureano, hacia el l907, el excelentísimo señor Obispo de la Diócesis don Vicente ALONSO SALGADO da el nombramiento de Patrona de HELLIN a la Virgen Santísima del Rosario.

La reforma más importante hasta la guerra civil fué la de pavimentación de la Ermita con el mármol blanco en 1917, la construcción de un trono procesional por el artista de la localidad Sebastián GUIILLEN y la consolidación de la Torre en tiempo de don Eduardo RODRIGUEZ.

En la guerra civil desaparece todo cuanto guardaba la ermita; sólo se salvó, por especial permisión de Dios, la cabeza del Niño Jesús que llevaba en sus brazos la venerada imagen de la Patrona. La Ermita sirvió de cuartel, y más tarde de comedor infantil.

Liberado HELLIN, es el Rosario la primera iglesia que se abre al culto sirviendo incluso de parroquia durante algún tiempo. Ya el 6 de abril se celebran los oficios propios del Jueves Santo.

Inmediatamente se inician los trabajos de restauración, y el 2 de junio se reúne una junta en la sacristía de la parroquia a IA que acuden las Autoridades locales y se acuerda encargar una nueva imagen de la Virgen al escultor don José FERNANDEZ ANDES. en el precio de 5.000 pesetas.

EL verano de 1939 es de gran actividad y gracias ¿I ella está decente la Ermita para las fiestas de octubre. El día 29 de septiembre anocheciendo,

hace su entrada solemne la soberana Virgen en HELLIN. El recuerdo de aquellos momentos está en la mente de todos. Las fuerzas militares que ano residían en HELLIN rinden honores y un gentío inmenso acompaña a la Virgen. Al pasar ante el Ayuntamiento, el señor alcalde, don José ALARCON PALACIOS, le ofrenda una vara de alcalde, cediendo a la Virgen su autoridad En nombre de HELLIN, la saluda y da la bienvenida desde un balcón del Municipio don Antonio MILLAN.

EL novenario de aquel año, con carácter de misión, lo predica el antiguo párroco y entusiasta de la Virgen del Rosario de HELLIN, ahora religioso jesuíta P. Eduardo RODRIGUEZ.

Desde entonces no decae la devoción ¿I la Patrona. Va en aumento hasta supera con creces los mejores tiempos de su historia. No cesan las obras en la Ermita, algunas de valor considerable. Más de 30.000 pesetas se emplean en la torre que de nuevo flaquea en sus cimientos. Se construye en Madrid un nuevo retablo, donación de don Antonio MILLAN, que es sustituído en 1947 por uno nuevo y más suntuoso, que construye Rafael MILLAN y policroma MUÑOZ BARBERAN. Este mismo repara el camarín, y He hace con esplendidez superior a la que nunca tuvo, con un pedestal de azulejos y tallas, todo ello costeado por doña Remedios MARIN, que desde principios del siglo es camarera de la Virgen. Con las aportaciones de los fieles y 25.000 pesetas del Ayuntamiento, se construye, bajo la dirección del escultor FERNANDEZ ANDES un suntuoso trono procesional por un precio superior a las 50.000 pesetas, que estrena el día de su fiesta de 1947; se hacen importantísimas reformas en el presbiterio y sacristía; se adquiere un órgano y se hacen otras obras, cuyo coste global, refiriéndonos sólo a lo gastado desde julio de 1947 hasta igual fecha de 1948, asciende a más de trescientas mil pesetas.

Como se ve, el culto a la Virgen del Rosario se mantiene fervoroso a través de los siglos, y las épocas en que decae es para para tomar nueva fuerza.

Anecdotario

No queremos cerrar esta crónica sin referirnos a un hecho curioso en la historia de la Cofradía y devoción a la Virgen, y que demuestra la venerable antigüedad de la misma.

Concurrían a la procesión del Corpus las imágenes más veneradas, con sus Cofradías. A la de 1750 acudieron los cofrades del Rosario y los franciscanos con la Cofradía de la Purísima. Surge una disputa sobre la preferencia que una u otra han de tener en la procesión, dada la antigüedad de cada una, y comenzada la procesión se retiran los franciscanos a su convento, ante la negativa de los del Rosario de darles preferencia

Se entabló un pleito, por lo que ha llegado la noticia hasta nosotros, aunque ignoramos hasta el presente cuál fué el resultado. Esto daría ocasión para conocer muchos datos de la historia. Conformémonos con conocer el hecho, que da idea, por lo que a nosotros interesa, del culto venerable por su antigüedad, tributado a nuestra Patrona.


NOTAS:


( * ) Trabajo o premiado en los Juegos Florales celebrados en HELLIN el día 5 de octubre de 1948. Se publica ahora por primera vez.
(1) <>. Fines del siglo XIX.)
(2) Joaquín Maldonado Macanaz en su Introducclon a Regalías de los Señores Reyes de Aragón>>, de Melchor de Macanaz. Madrid, 1879.
(3) En la Cofradía del Rosario tuvo el origen la procesión del Viernes Santo, que en un principio era una con la del Santo Entierro. Las ceremonias de esta procesión ocupaban todo el día del viernes.

(4) Hasta el año 36 tenían lugar colectas en las eras, almazaras Y los domingos Y fiestas se Pedía limosna en dinero por las calles. Las actuales circunstancias impiden la realización de las primeras y sólo subsiste la última. Con la limosna de los cepillos y las colectas que se realizan en los cultos, se han llevado a cabo estos años las importantísimas reformas de la Ermita. Los fieles acuden también con frecuencia con donativos de aceite para las lámparas de Nuestra Señora
(5) La procesión de los primeros domingos tiene lugar actualmente con extraordinaria concurrencia de fieles de la misa de once.

(6) Esta misa se celebra actualmente los primeros sábados de mes.

(7) Desde fecha remota se celebra también con novenario y fiesta la presentación del Niño en el Templo o Candelaria Esta fiesta corría a cargo del Ayuntamiento, el cual suministraba las ¿ándelas. Un concejal de mediados del siglo XIX, decía donosamente que las únicas ganancias que tenían los concejales eran la candela de este día y el desayuno del Jueves Santo. Ahora costea esta fiesta la Cofradía y no asiste el Ayuntamiento, quien sufraga y asiste a la fiesta principal que era antes carga de la Cofradía La fiesta de la Natividad fué siempre, o desde muy antiguo, cosa de la Parroquia que renuncia ese día a todos sus derechos; de la novena de la Natividad se encargan desde hace años los seminaristas y han introducido la simpática costumbre de que en ese día predique un hijo de Hellín y se preñare el que haya cantado misa en los últimos meses.
(8) Tomemos estos datos de unas notas sacadas de un manuscrito que perteneció a don Blas de los Ríos y que se guardaba en el convento de Santa Clara hasta el año 1936, que desapareció.
(9) Muy deteriorado se encontró este cuadro era el año 1939, después de la guerra. No ha podido ser restaurado como hubiera sido nuestro deseo.
(10) Los carlistas trajeron una banda de música La marcha Que Interpretaron se conserva ano entre nosotros trasmitida de oído, y la conocen por <.




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